¿Por qué es crucial contar con un abogado al redactar un contrato?¿Por qué es crucial contar con un abogado al redactar un contrato
En la actualidad, acceder a modelos de contratos a través de Internet es una práctica común. Sin embargo, surge la interrogante de por qué es recomendable contratar a un abogado para la redacción de un contrato específico para su situación. Esto aplica a una variedad de contratos, como los de compraventa, arras, arrendamiento, préstamos entre particulares, reconocimiento de deuda, obras y servicios, y obligaciones variadas entre las partes, así como contratos mercantiles, entre otros.
Los modelos genéricos disponibles en línea no siempre son adecuados para situaciones específicas y pueden generar problemas. Por ello, la intervención de un abogado es crucial para adaptar el contrato a las circunstancias particulares, evitando así futuros inconvenientes. Un abogado asegurará que el contrato contemple todos los supuestos posibles, reduciendo significativamente el porcentaje de incumplimientos y, por ende, la necesidad de litigios judiciales.
Los contratos funcionan como una ley entre las partes, con fuerza legal absoluta. Según el artículo 1255 del Código Civil, las partes tienen libertad para pactar lo que deseen, siempre que no sea contrario a la ley, la moral o el orden público. Es crucial entender que los contratos están hechos para ser cumplidos. La jurisprudencia establece que solo los incumplimientos sustanciales o relevantes pueden dar lugar a la resolución del contrato.
Los modelos de contrato descargados de Internet a menudo no incluyen cláusulas sobre penalizaciones por incumplimiento o cómo abordar situaciones de incumplimiento. Un contrato bien redactado por un abogado no solo cubrirá los aspectos necesarios para su cumplimiento, sino también las consecuencias de un incumplimiento, evitando así la necesidad de una resolución contractual por cada pequeña infracción.
Es importante destacar que no todas las cláusulas son válidas o aplicables tal como se redactan. Por ejemplo, una cláusula penal que estipula una indemnización desproporcionada puede ser moderada por un juez. Por ello, la asesoría de un abogado es fundamental para garantizar la eficacia y legalidad de un contrato, anticipando y previniendo problemas futuros.